La hormiguita

Delia del Carril Iraeta.


Grabadora y pintora trasandina, nacida en la provincia de Buenos Aires, en la estancia familiar de polvaredas un 27 de septiembre del año 1884. Sus padres fueron Víctor del Carril Domínguez y Julia Iraeta Iturriaga, un matrimonio que tuvo nada más y nada menos que 18 hijos, de los cuales vivieron trece. Delia era la quinta.


Los primeros años de su vida transcurrieron en su estancia, donde fue educada con las mejores institutrices extranjeras, de preferencia europeas, las que tenían la misión de dar una formación completa en lo referente a modales, idiomas y enseñanza básica.
A los 4 años ya se encaminaba en ser una gran jinete, debido a que su padre le regalo un caballo para que lo acompañara a sus paseos diarios, con aquel animal compartía gran parte de su tiempo, cosa que tenía maravillada a su familia e institutrices.

A los pocos años fue trasladado su padre a la Capital federal por su desempeño político(diputado de la república), en este nuevo escenario las monjas italianas fueron las encargadas para su educación, dado que tenían una llamativa orientación filosófica e intelectual, cosa que era imperante y llamativo para su familia al momento de tomar la decisión de la educación.

La vida de Delia en el bello París del siglo XX .

Debido a la trágica muerte de su padre , su madre viuda y con trece hijos, se traslada a Paris, con el fin de que sus hijos tuvieran mejores opciones de educación. Por mucho tiempo, Delia alternó su vida entre Paris y Buenos Aires. Sin embargo, con la irrupción de la 2º Guerra Mundial , Delia decide quedarse en Paris, donde comenzó una virtuosa vida de estudios, especialmente pintura, y fue allí donde comenzó a interiorizarse en el mundo de los grandes intelectuales franceses, etapa en la cual se enlista en el partido comunista de esa nación.


En síntesis, esta hija de aristócratas bonaerenses, que creció entre lujos y artes, de una belleza e inteligencia singular y casi sin parámetros, finalmente se casó en paris con un intelectual Argentino.


Caracterizada por un intelecto y temperamento sin igual, mujer muy liberal, se codeó con los mas grandes artistas parisinos de la época. Delia sin duda era una mujer aventajada e inigualable.


Después de 9 años de matrimonio se separa y decide viajar a España, mientras éste país vivía en carne propia la guerra civil. Se instaló en Madrid donde prosiguió estudios ligados a las artes, y como era de esperar formó parte de grandes grupos intelectuales de la epoca gracias y mas que nada a los vínculos familiares. Fue así como conoce al que en ese entonces era consul chileno en España, Pablo Neruda.



-"Un día en el Café Cerro nos presentan: -Mira Delia, éste es Pablo. Esta es Delia-. Caminó hacia mí, me miró. Entonces colocó su mano en mi hombro y nunca más la sacó de allí".-


Ella tenía 50 años y él, 30, y aún así se enamoraron, y mas ciertamente Delia del poeta. Ella era vital, inteligente y muy atractiva, por lo que la diferencia de edad no la consideraba importante. Después de un tiempo se casaron en México en 1943, ella abandonando su carrera artística por amor, siendo desde aqui en adelante su compañera.
"Hormiguita"
Su permanente actitud de ayudar a sus amigos y a los del poeta durante la guerra civil española, intelectuales con dificultades y artistas pobres, le valió que un día el pintor chileno Isaías Cabezón la bautizara como “hormiguita”, por la cantidad de energía que desplegaba permanentemente, y la capacidad de contagiarsela al resto.

"Delia lleva paquetes con mercaderías a los necesitados y abre sus ojos grandes para que entren por ellos los que arrancan del dolor. Por esto y por mucho más, Isaías Cabezón y Acario Cotapos la apodan "Hormiguita". "

Despés de 20 años de relación se separaron, historia que dicen separó hasta a los nerudianos en dos, amor del que no se rehizo, porque cuenta que cuando fallece el nobel chileno, lloró a mares en su cama.



En la década de los 60, Delia se inscribió en un Taller de Nemesio Antúnez, ahí siguió desarrollando su vida artística y perfeccionándose...

Para Neruda, Delia fue su mujer secreta, dicen que casi nunca se refería a ella, amiga inseparable hasta el fin de los días del famoso ficcionista , porque ella eventualmente, viviría hasta casi el fin de los tiempos: 104 años. Participó intensamente en muchas cosas ligadas a su amor Neruda, promoviéndo su obra como la edición del Canto General, una de las cumbres del poeta. Ésto hasta el año que se separaron, 1955.

Es difícil que Neruda haya olvidado a semejante bello animal bohemio, Musa generosa..., nacida sin límites, ni vencida por los vientos de la historia...
"Delia nunca dejó de ser argentina y siento que fue una mujer sin fronteras, una adelantada de su tiempo, una mujer briosa como sus magníficos caballos que pintó hasta el final de sus días."

Tú, la del país extenso a mí llegabas...

Delia, entre tantas hojas del árbol de la vida, tu presencia en el fuego, tu virtud de rocío:

en el viento iracundo una paloma....que el amor extinguido no es la muerte

sino una forma amarga de nacer...

Por eso, pasajera suavísima, hilo de acero y miel que ató mis manos

en los años sonoros existes tú, no como enredadera en el árbol sino con tu verdad.

Creó y expuso su prodigioso arte entre París, Buenos Aires y Santiago por casi por 30 años.

Delia, “flor de único tallo indoblegable”, como la llamaba el aclamado pintor y escritor español Rafael Alberti, falleció un día de invierno, el 26 de julio de 1989, a los majestuosos 104 años de edad.

Con Hipatia de alejandria dicen que la belleza, inteligencia y talento de esta gran mujer fueron legendarios...
Con Nefertiti decían que "la belleza ha llegado" ...
Yo digo que con "mi hormiguita"...Delia ha resucitado...






Por esto e infinito más eres"la hormiguita".
Si vivieras tanto el mundo sería distinto.
A mi bella amiga... Claudia, mi hormiguita.